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Todo lo que ingerimos por la boca se traduce en información en el cuerpo para que nuestras células, mitocondrias, microbiota y órganos funcionen en conjunto y de cierta manera. Los ultra procesados no son información de calidad ni alimento para tu cuerpo sino un producto comestible a los que la industria agrega múltiples ingredientes como sal, azúcares, aceites vegetales de mala calidad, edulcorantes, químicos, aromatizantes, colorantes (y muchas cosas más) con el fin de otorgarles más sabor y durabilidad. Esto termina transformando al producto en algo más adictivo y palatable, que produce menos saciedad y nos da ganas de seguir comiendo más y más. ¿A quién no le sucedió abrir un paquete de galletas y no poder parar hasta terminarlo? Lo mismo con las chuches, helados, snacks como patatas, etc. Por un lado al consumirlos nos impactan de manera negativa en la salud, hormonas, microbiota, intestino, piel, energía y un largo etcétera. Por otro lado, nos generan una gran liberación de dopamina (placer inmediato) en el momento de consumirlos, para luego generarnos un malestar como culpabilidad, ansiedad, inflamación, cansancio, retención de líquido, etc. Además, esta sensación inicial de placer y los ingredientes hacen que nos volvamos más adictos a este tipo de productos y comerlos en mayor cantidad sin apenas darnos cuenta ni sentirnos saciados.
Sin embargo, no decimos que no los consumas más, sino que bases tu alimentación en un 70 a 80 % con alimentos densos en nutrientes, sin procesar y que dejes un pequeño porcentaje a esos gustos que no son los más saludables, de manera ocasional y en reuniones sociales donde puedas compartir con otras personas.
Sin embargo, no decimos que no los consumas más, sino que bases tu alimentación en un 70 a 80 % con alimentos densos en nutrientes, sin procesar y que dejes un pequeño porcentaje a esos gustos que no son los más saludables, de manera ocasional y en reuniones sociales donde puedas compartir con otras personas.
Sabemos que es muy difícil encontrar en un mercado un snack realmente natural sin letra pequeña, sin ingredientes extraños. Las KIBAR como snack son prácticas y altas en proteínas, fibra y se pueden consumir a diario ya que constan TAN SOLO de 4 ingredientes, todos legibles y reconocibles, sin ningún tipo de saborizantes ni colorantes ni agregados químicos. La próxima vez que vayas a hacer las compras te aconsejamos leer los ingredientes de aquello que consumas y cuantos menos tengan el producto, mejor. Tienes que entender cuales son y saber a simple vista de que tratan, ya que a veces con denominaciones más “científicas” disfrazan al azúcar de 10 maneras diferentes. Por eso, lo que no puedas pronunciar, no lo consumas.